domingo, 6 de diciembre de 2009

El caracol del Patriarca




Hoy hemos visitado el Museo del Real Colegio Seminario del Corpus Christi del Patriarca, una joya extraordinaria que merece conocerse mejor. La persona al cargo nos llamó la atención sobre un detalle. Alguien ¿por qué? había picado este precioso caracol, un regalo de cotidianidad y vida que Mariano Benlliure añadió sin más motivo que su arte al pedestal de la estatua monumento a Juan Ribera, Patriarca de Antioquía, arzobispo y virrey de Valencia. No es que el personaje me resulte simpático, pero la historia es lo que es, y lo que no puedo entender ni entenderé nunca es la destrucción o el espolio.
Muchas de las esculturas al aire libre en Valencia han sufrido manipulaciones y destrozos, incluída la Fuente de los Niños del propio Benlliure.

sábado, 5 de diciembre de 2009

El regreso de San Martín




Ayer por la noche, yendo hacia el Carmen para cenar con una amigas, descubrí el regreso de San Martín a su fachada. Y no la réplica, sino el original que se conservaba en el Museo de San Pío V. Lleva allí desde el pasado 28 de diciembre. ¡Cuanto lo había echado de menos! No me gusta sin embargo el enlucido que cubre la piedra de la hornacina, aunque sí el rojo vino del pedestal. Lo que se fue se fue, y no se pueden reproducir los recuerdos. Y desconozco si el enlucido es correcto o una concesión estética a no se muy bien qué. La restauración del interior de San Martín Obispo y San Antonio Abad a manos de la Consellería de Infraestructuras y Transporte está por concluir. Me gustaría colarme en el interior. Será sede de la exposición "La Gloria del Barroco", promovida por la Fundación de las Imágenes para ya mismo.
La escultura de San Martín y el Mendigo, fechada en 1494, fue encargo de Don Vicent de Penyarroja, que así lo dejó encargado en su testamento ejecutado por sus albaceas y está atribuida a Peter de Beckere (1480-1527)-aunque no con seguridad-, autor también de la estatura funeraria de María de Borgoña en la iglesia de Nuestra Señora de Brujas (querida Brujas). Marcadamente gótico-flamenca, es una obra fundida en bronce en 40 piezas ensambladas en los talleres de Tournai. Llegó a Valencia un año después de la muerte del donante. Ha sido restaurada entre 2006 y 2008 por un equipo de especialistas dirigido por la catedrática Carmen Pérez, directora del Institut Valencià de Conservació i Restauració de Béns Culturals (IVACOR).