martes, 14 de abril de 2009

Craso error


En la antigua Roma, Craso, rico como Creso, llego a tener este status aprovechandose de los desesperados propietarios de insulae pasto de llamas. Los compraba in situ a por muy poco, reedificaba y alquilaba a muy buen precio. Porque lo que valía era el solar.
Venimos desde hace varias entradas denunciando el abandono de Ciutat Vella. Los edificios se dejan macerar durante años bajo un bien diseñado cartel de rehabilitación. Pero no se hace nada. Se deja al tiempo y a los elementos hacer su trabajo, hasta que sólo queda un cascarón vacío, territorio de caza para gatos y triste refugio para indigentes, condenado al derribo -si es que no cae o arde antes de amenazar vidas y bienes y ahí está el preciado solar. Hoy en el Levante:

Para las asociaciones vecinales de la zona, que barruntan nuevos colapsos o desprendimientos en el barrio, la causa de la situación es obvia: el abandono del centro histórico por ayuntamiento y Consell al no dotar económicamente al Plan Riva. El Ivvsa, por su parte, también lo tiene claro: las (constructoras) no son excesivamente proclives a actuar en el área por las especiales circunstancias que presenta. Y es que es imprescindible una excavación arqueológica previa que, en el mejor de los casos, demora la edificación o rehabilitación, y en el peor la paraliza durante años.

Y ese es otro tema. El molesto patrimonio arqueológico. Ya no es tan interesante el solar, así que... a ver si cae alguna subvención.
Entre tanto, lo peculiar y único de la ciudad, su ángel, ha desaparecido.

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