Rodeada de colmenas, enormes edificios de viviendas nuevas, al otro lado de General Avilés, esta pequeña plaza ocupada casi enteramente por un precioso parque, en mi opinión, de los mejor diseñados y cuidados que conozco. Es el oasis en el desierto de hormigón, el color que vence al gris, la única zona verde de un barrio en el que ahora se construye el nuevo Mestalla sobre terrenos que fueron en principio asignados a dotación pública.
Esto da para otra entrada.
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